Los amores virtuales no existen, lo escribiré una vez más gentil lector, los amores virtuales no existen. A pesar de toda la literatura y experiencias que contradicen tajantemente mi afirmación y que no son otra cosa que excepciones que hacen más rara y deformada la idea de una relación. Ningún proceso a contribuido más dificultar la interacción humana que la internet, palabras como gosthing, stalking, gromming, se han sumado a las ya de por sí complejas relaciones de pareja. Y es que vivimos pendientes, y muchas veces absorbidos viendo a través de nuestras sofisticadas pantallas las aventuras de personas inexistentes, en ambientes paradisiacos que nada tienen que ver con la realidad de los miles de seguidores que por la parafernalia tecnológica hemos perdido la capacidad de diferenciar el sueño de la realidad. Pero no todo son imágenes afrodisiacas y perturbadoras las redes sociales cual derivación de la escritura, al menos como las conocimos a principios del año 2000. ...