Esther...

Lucha de gigantes

Convierte

El aire en gas natural

Un duelo salvaje

Advierte 

lo cerca que ando de entrar 

en un mundo descomunal

siento mi fragilidad

Nacha Pop (1987)

El 26 de Febrero de 2013 Elba Esther Gordillo Morales fue apresada por oponerse a la Reforma Educativa de Enrique Peña Nieto,  desde entonces y hasta la fecha es sujeto de un proceso judicial que desde el 16 de diciembre del año pasado ha tenido que vivir en su casa, bajo la figura de la prisión domiciliaria.  

Recientemente la Procuradora General de la República, ha restringido sus visitas y llamadas telefónicas, por considerar que podría desestabilizar al estado mexicano, ¿puede una mujer de 70 años, con insuficiencia renal, y una fama como la de la otrora líder sindical representar una amenaza seria para el país?  Al menos el gobierno de Peña Nieto parece pensar que sí.

Elba Esther, la líder invencible, aquella maestra Chiapaneca que supo llevar su pasión -la educación- a un lugar extraño, la cumbre de la política mexicana, ella al parecer ha pactado con todas las figuras clave de los últimos tiempos en el país, desde Carlos Salinas de Gortari hasta el propio Andres Manuel López Obrador, ha tenido derrotas, ha sido traicionada -como ningún otro político- y sin embargo sigue ahí.

Elba la mujer aquella que en medio de un conflicto ha sabido capitalizar para el movimiento magisterial la coyuntura educativa reciente, demostrando no sólo que tenía razón, sino que la reforma  no estuvo bien, pues nunca planteo los temas adecuados. 

Esther la mujer que perdió una hija, que sobrevive a una enfermedad producto de la donación de un riñón a su difunto esposo, la de las mil mareas, la que supo defender el gremio de los ataques de dentro y sobre todo los de fuera, el contrapeso a los intereses empresariales, declaro  en una entrevista a Ciro Gómez Leyva que  los maestros no la hemos olvidado, tiene razón y por eso el estado mexicano le teme.