En el Foro que se celebró el 1° de Agosto en Casa Lamm, auspiciado por el Diario la Jornada, un nutrido grupo de asistentes pudimos escuchar las reflexiones de varios especialistas en temas educativos, como Ángel Díaz Barriga y Hugo Casanova, así como de dos miembros de la CNTE (Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación), entre ellos Enrique Enriquez Ibarra líder de la sección 9° del Distrito Federal que en lo días pasados encabezo una protesta que llevo a la capital del País a vivir una de las contundentes muestras de rechazo a la Reforma Educativa.
Lo primero que llama la atención de esa reunión, donde tanto ponentes como público parecían concluir que el modelo educativo de "Enrique Peña Nieto amenazaba con destruir el futuro del país", es la distinción semántica que se realizo sobre dos conceptos contrapuestos: "modelo" vs "proyecto", y es que a decir de los participantes la primera noción conserva la verticalidad y autoritarismo con el que se ha querido subsanar el abandono educativo de los años recientes.
La palabra modelo, que engloba el proyecto educativo de la Secretaria de Educación Pública (SEP), viene de las ciencias exactas y hace referencia a una suerte de prescripción donde ya todo esta dado, es "algo donde todas las partes encajan", "figura de barro para reproducir en madera".
La palabra proyecto en cambio que reivindica la CNTE, tiene una carga histórica, ya que fue así como se conocieron a todas reformas educativas anteriores, desde Vasconcelos hasta el eficientismo de la educación en los años ochentas. Es por otra parte una denominación que pretende englobar según los representantes de la Coordinadora, los mecanismos mediante los cuales permitirán que todos los participantes sean incluidos en su diseño e implementación.
Las críticas al modelo no se hicieron esperar; ya que la presencia de un tipo ideal de estudiante contenida en el documento "Los fines de la educación del siglo XXI", parece a la luz de investigadores como Angel Díaz Barriga excesivo y descontextualizado, según sus palabras es "una exigencia de alumnos para el primer mundo, que no logran ni el primer mundo". Así mismo en palabras de los lideres de la CNTE, presentes en el foro un reiterado compromiso en los textos presentados por el gobierno para reducir los contenidos didácticos, empobreciendo el programa educativo sin que exista una justificación académica de la viabilidad de los temas presentados o su trascendencia.
Otro aspecto polémico del modelo de la SEP es que busca reciclar el pacto SEP/SNTE, es decir, si toda la tragedia educativa de los últimos años se ha debido a los intentos del estado por recuperar la rectoría de la educación supuestamente secuestrada por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, todo esto ha sido en vano, pues la pretensión del gobierno, con el pretexto de la gobernanza es incorporar a este organismo y reconocerlo como aliado privilegiado, ignorando a la disidencia magisterial, lo cuál seguramente seguirá provocando inestabilidad.
Las intenciones del modelo de la S.E.P., quedan en el aire pues, en lo que Hugo Casanova llamo "el capítulo más reciente de la crisis de conducción el Sistema Educativo Mexicano", se presentan cuando el sexenio está a punto de terminar, sin que haya mediado consulta alguna para su elaboración, y que en terminos generales sigue conservando el carácter punitivo de la evaluación.
Igualmente el foro sirvió para denunciar una serie de situaciones que han venido sucediendo en la implementación de la reforma, ya que al parecer la SEP, se ha visto imposibilitada, para realizar el Censo de maestros por si misma, así como todas las figuras de la reforma que son inexistentes, es decir la reforma dice que existen pero estos nunca han llegado a las escuelas, como los Asesores Técnico Pedagógicos, los tutores para los prelados -así se les llama a los maestros que han entrado al servicio a partir de la fundación del Servicio Profesional Docente-, y donde el primer examen de evaluación del desempeño lo hizo el CENEVAL, una organización privada. Todo esto evidencia una incapacidad técnica y organizativa que ha caracterizado la gestión priista de Enrique Peña Nieto.
Aunque todos los ponentes coincidieron en que en existen varios conceptos de última generación en la propuesta del gobierno como Flexibilidad, autonomía, adaptación y ambientes de aprendizaje. Estos quedan inoperantes por todo un sistema que se ha caracterizado por la corrupción y solo servirán como instrumentos de dominación, ya que a la escuela le queda resolver una vez más como operará la nueva propuesta, en la que se pide mucho más a los más pobres -los niños indígenas por ejemplo tendrán que aprender dos idiomas más, ya que aparte de su lengua materna deberán adquirir el español y el inglés- y en el que de manera general se menciona a las normales, únicamente para aclarar que la formación inicial de maestros, deberá sujetarse a estas disposiciones y que compartirán con las universidades dicha responsabilidad.
¿Qué pasará con todas estas modalidades que si bien son herencia de una educación que pretendió ser inclusiva y hoy no lo parece tanto, albergan en sus aulas a los alumnos más pobres y marginados del país? Por lo que se enuncia en el Modelo Educativo y el silencio de las autoridades que promueven la protesta es imposible contestar en este momento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario