El libro de Oliver Sacks, que no deja de sorprenderme se llama "Veo una Voz, viaje al mundo de los sordos", el cuál ha sido una muestra clave de lo que a mi parecer era forma de atrapar al lector y consistía en llevarnos de una situación cualquiera, a comprender la profunda significación de los actos más sencillos y que por si mismos son un milagro y es que actos como hablar, leer, o escuchar solo cobran importancia en nosotros cuando no los poseemos o se nos atrofian. Ese bello texto que entre otras cosas me sirvió para introducirme en el misterio mental que es la construcción de la temporalidad, fue publicado por Editorial Anagrama, casa editorial que el año pasado, nos regaló a todos los fanáticos del celebre neurólogo, el que me ha parecido su libro más estremecedor: "En movimiento". Y es que contrariamente a otros textos del autor este me ha dejado un gran vacío. La estructura del libro que parece confusa en un principio, se v...